jueves, 5 de marzo de 2009

AÑO 2007 - ARQUITECTURA III CATEDRA LINDER - IRIBARNER


La arquitectura entrega sus contenidos en la medida que aprendemos a leer y escuchar sus códigos, para reconocernos como personajes de su narrativa.
En medio de tanta información, nuestro propio contexto inmediato nos trae ciertos relatos, pero el ruido de la globalidad, los hace aparecer imperceptibles, mudos e invisibles.
Es casi un hecho, que nuestra propia realidad llámese paisaje, entorno, cultura, o ámbito parece sernos un tanto ajena, al no ejercitar esa lectura.
El propósito es reconocer esta realidad y a la cual queremos y debemos asignar el valor que se merece.





El objetivo primordial es la valoración y la preservación de un lugar único en la ciudad, que conservó en el tiempo su identidad, dentro de un entorno arquitectónico, paisajístico y social muy auténtico.
Para desarrollo de la propuesta se ha tenido especialmente en consideración los servicios urbanos existentes y propuestos; el respeto a las características históricas y culturales del lugar; las cuestiones de lenguaje del proyecto, reconociendo la identidad cultural del barrio; los métodos constructivos y materiales adecuados bajo el punto de vista creativo; la propuesta y adecuación de nuevos servicios a las necesidades contemporáneas de vida urbana.
En síntesis, la propuesta nace de pensar el lugar como un conjunto, pero particionado por su multiplicidad de posibilidades, caracteres que hacen un lugar variable y heterogéneo.
Desde esta perspectiva la propuesta parte de la idea de crear una serie cajas, que se vinculan mediante una faja, un camino, una especie de franja que los penetra, los recorre, y los vincula entre si y va diseñando las transiciones entre las distintas áreas.
Se trata de una arquitectura de vinculación, de unión, de integración, conseguida a través de un edificio de máxima peatonalidad.


AUTOR: WALTER MATIAS FERNANDEZ



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